Un estudiante de ingeniería consigue disfrutar del gran mundo de la Fórmula Uno…
Me llamo Marcello D’Aprille, soy un estudiante de ingeniería mecánica de 21 años, estoy en mi segundo año en el Imperial College de Londres y siempre me ha fascinado el funcionamiento de los motores.
En realidad, no solo de los motores. Cualquier cosa que sea mecánica. Me gusta todo de un coche: la suspensión, el sistema eléctrico… ¡Todo! Aunque estoy estudiando esta materia, me sigo quedando sorprendido cuando me paro a pensar en todo el trabajo que implica conseguir que un coche se mueva. Los miles de partes que lo componen, el tiempo, la precisión o el propio proceso mecánico.
Pero, por supuesto, no soy único. La razón principal por la que los coches han avanzado tanto en los últimos 100 años es que siempre ha habido cientos y miles de personas con mi misma fascinación y estas personas son las que me inspiraron para estudiar ingeniería.
Por eso, cuando descubrí que Top Gear y Castrol, socio oficial del Renault Sport Formula One Team, estaban buscando a alguien como yo para supervisar tras la puerta del taller del Renault Sport Team, no me lo pensé dos veces. He sido un fan de la F1 desde que era un niño. ¿Y qué esperas? Soy italiano. Así que, siguiendo el verdadero estilo italiano, primero dije que sí y luego pregunté en qué consistía el puesto, por lo que no tenía ni idea de que iba a estar codo con codo con una de las leyendas de la ingeniería de este deporte.
Bob Bell es Director Técnico de Renault Sport Racing, uno de los tres equipos principales en la parrilla de la Fórmula Uno. El fabricante francés de vehículos volvió al deporte, como equipo oficial de trabajo, a comienzos de la última temporada, pero ganó su primer Gran Premio en el año 1979. Recientemente, el equipo ganó de manera consecutiva los títulos del Campeonato Mundial de Pilotos y de Constructores en 2005 y 2006. Y adivina quién era el Director Técnico del equipo que guio hace 12 años a Fernando Alonso hacia sus dos títulos mundiales…
Hace poco descubrí que Bob nació en Belfast, que tiene un doctorado en ingeniería aeronáutica y que comenzó su carrera en la Fórmula Uno de la mano de McLaren. Pero lo que realmente quería saber era qué tenía que hacer para poder trabajar con alguien como él.
Dado tu increíble y amplia experiencia y éxito en este deporte, ¿qué buscas cuando contratas personal técnico, desde ingenieros senior hasta un equipo mecánico de pruebas?
Bueno, los requisitos son obvios: cuál es la formación del candidato, dónde ha estudiado… Ese tipo de cosas. Pero también intervienen otros factores. La Fórmula Uno es un deporte y un negocio que se basa en el desempeño del equipo. Los dos pilotos que conducen nuestros coches son las caras que los fans ven y conocen, pero detrás de ellos hay cientos de personas que los colocan en la parrilla. ¡Es vital que esta gente se lleve bien! Así que la personalidad, el temperamento y la actitud también juegan un papel fundamental.
Como sabes, fue Castrol quien quedó contigo para que viniera hoy. Desde tu punto de vista, ¿qué asociación técnica como la que tú tienes con Castrol le proporcionas al Renault Sport Formula One Team?
Es sencillo. Es de sobra conocido que la Fórmula Uno es la categoría reina del automovilismo en el mundo. Supera a cualquier otra competición en términos de rendimiento, tecnología, investigación y desarrollo automovilístico en general. Todo nuestro trabajo tiene como objetivo la victoria y la diferencia entre el éxito y el fracaso es mínima. Unos milímetros de error en la fabricación de un componente o en la línea de visión del piloto en una esquina puede suponer la pérdida de fracciones de segundo y calificarse en la 13ª posición en lugar de en la 5ª. O acabar sin puntos en lugar de en el podio. Esos son los márgenes.
Por este motivo, ponemos todo nuestro empeño en conseguir los mejores resultados y elegimos a los mejores socios técnicos, quienes desempeñan las cosas que nosotros no podemos, como el desarrollo de combustibles y aceites. BP Castrol son expertos de reconocimiento mundial en este ámbito, con una historia marcada por el éxito en el mundo del automovilismo. Gracias a su aportación, conseguimos el máximo rendimiento de nuestros motores. Tan simple como eso.
Y así fue como empecé oficialmente la mejor semana de mi vida hasta el momento. El lunes pasé el día en la fábrica del Renault Sport Formula One Team y pude entrevistar a un miembro de la aristocracia de la ingeniería automovilística. Este fin de semana, voy a pasar tres días con el equipo en el Gran Premio de Gran Bretaña. Pero no me voy a quedar sentado en las gradas. Castrol me ha pedido que esté pendiente de cómo funciona el Renault Sport Formula One Team durante esos tres días y que suba stories e imágenes sobre mi primera vez en el Gran Premio de Gran Bretaña.