En el complejo deportivo Tiro de Pichón se presentaba a la prensa la tercera generación del benjamín de la gama Mercedes, el Clase A. CulturaRacing.es estuvo allí y tuvo la oportunidad de probarlo en primicia.
Renovado por completo, se adapta a un mercado exigente y busca hueco en un nicho de ventas hasta ahora nunca explorado por Mercedes, el de los compactos de 5 puertas.
Para ello, pierde la configuración de monovolumen compacto que lo ha caracterizado en sus dos anteriores generaciones (W168 de 1997 y W169 de 2004), pierde 18 cms de altura y crece en longitud y anchura para adoptar, con un magnífico resultado, una carrocería tipo hatchback.
Diseño Exterior
Si lo comparamos con los anteriores Clase A, cuesta un poco acostumbrarse a esta nueva carrocería, ya que poco o nada tiene que ver el exterior del nuevo modelo con los anteriores, dando un gran paso adelante en el diseño y situándose a la par del resto de la gama Mercedes.
Aunque por mucho que haya cambiado estéticamente, la gran estrella frontal y la caída del pilar C nos recuerdan que estamos ante un auténtico Mercedes-Benz.
Una vez superada la primera impresión de «¿Eso es un Clase A?«, si olvidamos por un momento la tradición estética de la marca de Stuttgart y lo vemos como un modelo nuevo, sin precedentes, ya parece otra cosa… y la verdad es que empieza a gustar.
Este diseño exterior gana personalidad e imprime un caracter inequívocamente juvenil, conjugando con bastante éxito una carrocería de aspecto refinado y deportivo, y transmitiendo a su vez una imagen de robustez.
La parte frontal, protagonizada por la gran calandra, cobra mucha fuerza. La estrella de tres puntas no va situada sobre el capó como en las berlinas de la marca, sino en el centro de la parrilla como en los coupes.
El paragolpes delantero tiene grandes y agresivas entradas de aire -con rejilla de nido de abeja- incluso en las versiones menos potentes, mientras que el trasero incluye un difusor de aire y doble salida de escape.
Los faros se llevan la palma en cuanto al diseño, con una forma muy trabajada que incluye luz diurna por LEDs, un proyector bi-xenon, y un embellecedor cromado que agudiza esa sensacion de deportividad y tecnología.
En la vista lateral, su cintura alta y musculosa aporta fuerza y dinamismo al conjunto, combinando con mucho acierto nervaduras ascendentes y descendentes. Los espejos retrovisores son similares al resto de modelos de Merceces, en incluyen el repetidor de intermitencia con forma de flecha.
Con respecto a la aerodinámica, desde el principio del proyecto, AMG -la división deportiva de Mercedes- ha tomado parte en el desarrollo del vehículo. No por casualidad el nuevo Clase A tiene el mejor coeficiente aerodinámico de su segmento, con un Cx de sólo 0,26.
Interior
El nuevo Clase A pasa página a los interiores que han caracterizado las anteriores generaciones de Mercedes, bastante más conservadores, pero solo en diseño, ya que la calidad de materiales del habitáculo sigue estando un paso por encima de la competencia. Este nuevo modelo rompe moldes y mezcla con maestría el refinamiento y el buen gusto en un interior que rebosa deportividad.
El cockpit nos recuerda al fantástico Mercedes SLS AMG, así que no hablamos a la ligera si decimos que, con diferencia, es el interior más bonito de cuantos compactos de última generación hay en el mercado.
Además del aspecto joven y deportivo, los materiales nobles y las zonas acolchadas abundan por todo el interior del habitáculo. Los guarnecidos están forrados de piel y llevan las costuras en color blanco a juego con las del volante. Apliques de aluminio pulido rematan las toberas de aireación, los tiradores de las puertas y algunas zonas de la consola central.
A los que hemos sido entusiastas de Mercedes en los años ’80 y ’90, nos gusta seguir encontrando detalles y reminiscencias del pasado como los pestillos de las puertas, las toberas de aire redondas, o la sempiterna ubicación de la llave de arranque.
La parte superior del salpicadero es de un material similar al que se emplea en todos los de Mercedes, con una calidad y resistencia al paso del tiempo bastante probada. La parte central, de un color claro, tiene una textura bastante agradable y es acolchada, no hemos visto un material como este en ningún vehículo que hayamos probado hasta ahora.
El cuadro de instrumentación sobresale por su deportividad, tanto las grafías como el fondo de los relojes se inspiran en la competición y nos trasladan a los Mercedes de carreras. En estado de reposo, las agujas quedan mirando hacia abajo, otro guiño más al mundo de la competición. En el centro, un gran display nos muestra la información del ordenador de a bordo.
El volante también resulta espectacular a pesar de tener un aro algo fino y duro. En los radios horzontales lleva muchos botones -seis en cada uno- que precisan un rápido aprendizaje, pero que luego te permiten navegar cómodamente por el menú del ordenador de a bordo y controlar el manos libres del teléfono.
En el centro del salpicadero encontramos la pantalla suspendida del sistema multimedia. Tiene 18 cms y una resolución de 800 x 480, y puede conectarse a internet a través de nuestro Smartphone y visualizar en la pantalla aplicaciones como Google Maps o actualizar tu perfil en las redes sociales.
El mando para liberar el freno de mano está en la ubicación habitual de Mercedes, pero al ser eléctrico pierde el pedal de accionamiento. Para ponerlo basta con pulsarlo y para quitarlo solo hay que tirar levemente. Nos hubiera gustado que estuviera unos centimetros más arriba porque hay que alargar la mano y separarse del respaldo para llegar hasta él. No representa un gran problema, pero en otros modelos de Mercedes este mando está colocado más arriba y es más fácil accionarlo. Claro que el nuevo Clase A cuenta con bloqueo automático de frenos, por lo que en leves paradas -como en un semáforo o en una rampa empinada- no necesitamos usar el de mano.
El pomo de la palanca de cambios parece una obra de orfebrería. Aluminio, piel perforada, costuras de hilo y el aplique con el esquema de las marchas se conjugan perfectamente en unos pocos centímetros, con la agradable y cómoda forma que siempre han tenido los pomos de Mercedes.
Los asientos deportivos son otro punto fuerte del interior, por diseño son de lo mejor que hemos visto. Tienen un tapizado mixto de tela y piel, y su forma de baquet con los cabezales integrados aporta un gran toque diferenciador que los situan por delante de la competencia. La banqueta trasera contína con este diseño, y además cuenta con anclajes Isofix.
El espacio para los pasajeros en la parte de atrás es el habitual en los coches de este tamaño, es cómodo y los pies caben perfectamente bajo los asientos delanteros, bastante mejor que en compactos de otras marcas que hemos probado. Por contra, el techo negro y los grandes cabezales de los asientos delanteros contribuyen a disminuir la sensacion de espacio, en la que influye la acusada caída del techo, pero solo en apariencia, ya que resta menos espacio del que cabría esperar y un adulto de 1,80 puede acomodarse sin problemas.
Las alfombrillas y el tapizado del suelo, algo en lo que la mayoría de la gente no se fija, tienen muy buena presencia y mullido, a tono con la tradición de la marca. Son de color negro y no gris oscuro como suelen ser en otras marcas, y junto al ribeteado de color blanco terminan de rematar un interior perfecto.
Maletero
Buen maletero, regular en sus formas y con una capacidad de 341 litros ampliable hasta 1.157 si abatimos los respaldos de los asientos traseros. La boca de carga queda algo alta y estrecha. Hay argollas para sujetar la carga.
Un detalle que nos ha gustado bastante y no hemos encontrado en ninguna otra marca es el asidero interior para cerrar el portón. Una solución bastante básica pero que facilita la tarea de cerrar el maletero cuando el porton está abierto del todo y lo cogemos para tirar. Lo que nos encontramos normalmente en este tipo de coches es un espacio con forma de sobre para meter la mano, pero que solo permite una postura.
Motor
Nuestra unidad de pruebas, el A180 CDI, se beneficia de la joint venture entre Mercedes y Renault, y equipa por primera vez en la historia un motor de la marca francesa, concretamente el 1.5 dCi que tan buen resultado ha dado en los modelos de Renault, Dacia y Nissan que lo montan.
El alto coste de desarrollo de un motor de baja cilindrada que cumpla las restrictivas normas de consumo y emisiones ha hecho que Mercedes decida montar un propulsor de otro fabricante. Las razones que alega la marca para haber elegido el propulsor Renault son las bajas emisiones contaminantes, el reducido consumo y una probada fiabilidad.
Eso sí, antes de montarlo en el nuevo Clase A, el motor ha pasado por el exigente laboratorio de Mercedes, probándolo a fondo y mejorando algunos aspectos de fiabilidad -como la correa de la distribución- para adaptarlo a las exigencias de calidad de la marca.
Por tanto, la fiabilidad de este motor está fuera de toda duda, y el rendimiento es ejemplar, con una potencia de 109 cv y un par de 250 Nm.
Conducción
La posición de conducción del nuevo Clase A es agradable y algo deportiva. La ergonomía prima ante todo y el conductor viaja cómodo y rodeado de buenos materiales, aunque va muy tendido, con las piernas estiradas y el volante muy vertical como en los coches deportivos, incitando a ir rápido y tomar curvas.
La dirección electromecánica es suave y precisa, y se endurece cuando ganamos velocidad. La caja de cambios es de 6 relaciones y está muy bien escalonada, sin apenas saltos entre una y otra. Los pedales estan un poco más altos de lo habitual, algo que apenas se nota pero obliga a estirar el pie del todo para pisar el embrague.
El coche tiene un rodar muy suave, libre de ruidos parásitos mientras circulamos por firmes en buenas condiciones, pero al llegar a asfalto roto percibimos algo de rumorosidad, eso si, las suspensiones -con eje trasero multibrazo- filtran a la perfección las irregularidades del terreno.
En conducción deportiva el coche se muestra ágil enlazando curvas, muy suave, aunque aparece algo de subviraje cuando subimos el ritmo. Los neumáticos Yokohama cumplen, y la suspensión trabaja de forma que no perdamos la comodidad en ningún momento.
El motor se muestra muy satisfacotorio desde abajo, muy lleno, sube rápido de vueltas y entrega la potencia de forma progresiva y constante, sobre todo teniendo en cuenta que es un 1.500 cc. El trabajo de aislamiento del vano motor da sus frutos y ni desde el habitáculo ni desde el exterior apenas percibimos el sonido de la mecánica.
El Clase A, es junto al Clase B, el único de la gama Mercedes con tracción delantera. Para las manos menos expertas esto supone una ventaja, ya que desaparece el riesgo de sobreviraje al circular por superficies deslizantes, aunque tambien es verdad que los controles electrónicos modernos mitigan en gran medida estas reacciones.
Para maniobrar y aparcar, el voladizo delantero y el largo morro requieren un proceso de adaptación. Una vez que le tenemos tomadas las medidas no hay problema. La visibilidad hacia atrás es limitada debido al tamaño de la luneta trasera, pero al meter marcha atrás la camara móvil muestra la imagen en la pantalla central, lo que acaba rápidamente con este inconveniente.
Características y equipamiento
Los Mercedes siempre se han caracterizado por ser uno los coches más seguros del mercado, y este nuevo modelo no iba a ser menos. La dotación de seguridad de serie del nuevo Clase A es bastante completa, e incluye el sistema COLLISION PREVENTION ASSIST que identifica los vehículos que van delante, el sistema ATTENTION ASSIST que alerta al conductor cuando aparecen síntomas de fatiga, la función HOLD del freno, y la ayuda al arranque en pendientes.
Opcionalmente puede incluir el sistema preventivo de protección de los ocupantes PRE-SAFE®, el sistema DISTRONIC PLUS que regula la distancia con el vehículo que llevamos delante, el paquete Control de Carril o la Ayuda Activa para Aparccar con función PARKTRONIC y cámara trasera.
Exsiten tres niveles de acabados y equipamiento: Urban, Style y AMG Sport.
Tanto los motores Diesel como las gasolina cuentan con la tecnología BlueEFFICIENCY, inyección directa y turbo, e incorporan la función de parada y arranque ECO. Todos traen 6 velocidades y opcionalmente una caja automática secuencial de doble emgrague 7G-DCT con tres programas de conducción: Economy, Sport o Manual.
La gama de motorizaciones disponibles en Gasolina son A180 115 cv, A200 156cv y A250 211 cv. En Diesel, el A180 CDI de 109 cv, A 200 CDI de 136 cv y A220 CDI de 170 cv.
Las medidas del vehículo son: largo/ancho/alto: 4.292/1.780/1.433 milímetros. El peso varía entre los 1.370 Kg del A180 y los 1.475 del A200 CDI.
En resumen, Mercedes ha entrado de lleno en el reñido segmento de los compactos de 5 puertas, y lo hace con un producto que cumple de sobra con lo que cabe exigir a un coche de la marca alemana. Diseño innovador, interior deportivo, comportamiento ejemplar y motores eficientes son los argumentos con los que el nuevo Clase A competirá con el BMW Serie 1, el Lexus CT 200h, el Audi A3 o el VW Golf.
Si quieres saber más sobre el nuevo Clase A puedes acercarte a tu concesionario Mercedes-Benz VV Motors: www.vvmotors.com
Texto y Fotos: Manuel Garrido, JuanGa RR.